Archivo AFP


Los dolorosos recuerdos del huracán Katrina revivieron este martes en Nueva Orleans, cuando se cumplen 12 años de la catástrofe, con las fuertes lluvias que trajo Harvey y las constantes fallas de las bombas que protegen a la ciudad de inundaciones.

Está previsto que la tormenta tropical Harvey, que literalmente ha anegado el sureste de Texas y la ciudad más grande del estado con millones de litros de agua, regrese a tierra por segunda vez y que golpee en esta ocasión parte de Luisiana, un poco más al este.

Más de quince centímetros de lluvia cayeron sobre Nueva Orleans, que tiene una buena parte de su territorio bajo el nivel del mar, protegida por diques y sobre todo por una red de 120 bombas que deben absorber el agua de la ciudad.

Por el momento la capital estadounidense del jazz está seca, pero se esperan entre siete y diez centímetros de agua por la noche.

El alcalde Mitch Landrieu dio buenas noticias: la ciudad se ahorrará lo peor. "Las previsiones meteorológicas son un poco mejores para nosotros", afirmó en una conferencia de prensa en la que pidió que las escuelas y edificios públicos, cerrados el martes, retomen sus actividades este miércoles.



El 29 de agosto de 2005 los diques cayeron ante la fuerte subida de nivel del mar. Los vientos violentos de Katrina, que golpeaban por segunda vez, formaron un muro de 8 metro de agua. Nueva Orleans se inundo en una cuantas horas.

Katrina, que dejó 1.800 muertos y 108.000 damnificados, conmocionó a Estados Unidos con imágenes de miles de personas atrapadas por días enteros, sin ninguna ayuda, sobre sus techos o en un estadio cubierto que se transformó en un gran tugurio en donde reinó la violencia.

"Las imágenes de aquellos que estuvieron atrapados y sus historias de supervivencia están grabadas en nuestras almas para siempre, y nos regresan con el diluvio de imágenes de Houston", señaló Landrieu.

El alcalde pidió a los ciudadanos quedarse en casa. Muchos han empezado desde hace mucho a llenar los sacos de arena.